Pues os voy a contar un poco la historia con este coche y mis intenciones con él, así como las pocas cosillas que le he podido ir haciendo. (lamentablemente muchas de las fotos se me han perdido debido a que se me fastidio la tarjeta de memoria que las contenía). Hoy va a ser bastante texto contanto como me hice con el, y los proximos dias habrá mas fotos.


Allá por el año pasado, sobre mayo de 2016 apareció este coche en internet. La verdad es que desde que estoy metido en el mundo del 205 y descubrí esta edición, me enamoré. Es de las que más me gusta. A lo que iba, lo vi publicado por un precio bastante bajo, en la descripción del anuncio la persona ponía “el coche arranca y anda”.
Yo soy de Santiago y el coche se encontraba en Madrid. En esos momentos disponía del dinero casi justo, de hecho, tuve que pedir prestado para comprarlo. Lo vi como una oportunidad única de hacerme con ese modelo que tanto me gustaba. Total, ese mismo día me puse en contacto con el dueño, le deposité una señal, cogí lo básico para pasar un día y me fui a Madrid.

Al día siguiente fui a ver el coche que se veía en las fotos del anuncio. Realmente el estado era deplorable, pero yo estaba ciego, le veía futuro y me gustaba un montón aun estando destrozado. Bueno, lo arrancamos con pinzas y para mí se veía “bien”. Yo en esos momentos no tenía ni idea de mecánica y en mi opinión al coche solo había que hacerle lo básico (aceite, filtros, batería, etc. Era con la cantidad de dinero que contaba). Nos acercamos a un taller que se encontraba al lado de la casa del dueño, llegamos como pudimos ya que el coche se calaba cada 2x3. Como decía, no tenía ni idea de mecánica y cegado como estaba con semejante edición yo pensaba que eso era porque había que hacerle un par de apaños básicos. Al fin y al cabo, el coche “arrancaba y andaba”.

Llegamos al taller, era pequeño, dos mecánicos y un tercero de prácticas. El jefe del taller le echa un ojo por encima, no pone muy buena cara. Como estaba ocupado me dice que tengo que esperar. Mientras me quedo a solas con el dueño y me dice:
- Dueño: Vives muy lejos y no te va a llegar hasta ahí, ¿seguro que te lo quieres quedar?
- Yo: Pues claro, ya estoy aquí y maloserá que no llegue. (yo para mí también pensaba que ya de estar ahí irme con las manos vacías significaba perder más de 100 euros, solo por la señal, el pasaje del tren y etc.)
Así que, le doy el dinero, el me desea suerte y se va. Me quedo esperando al mecánico y cuando se desocupa se acerca al coche y se pone a verlo detenidamente, lo enciende y ve que pierde refrigerante en cero-coma. Quita la tapa del bloque y se encuentra con una cantidad de “mostaza” impresionante. Me dice sin dudarlo ni un segundo: CULATA.
En esos momentos yo me quedé como… ¿qué significa eso? ¿Es grave? ¿Cuánto cuesta?

En cuanto me dijo un precio aproximado casi me da un infarto. Me estrese un montón porque no contaba con tanto dinero, mis padres me habían insistido en que no fuera a por el coche y no me querían ayudar. Por lo que me dijeron que lo dejara allí y me devolviese a Santiago o que lo vendiera a alguien interesado.

No tenía nada que hacer ni de dónde sacar más dinero. A saber qué cara tenía en ese momento. Estaba desesperado. Después de pensar y pensar durante un par de horas, ya dieron las 14, hora a la que cerraba el taller. Se me acerco el mecánico y me dijo “vete a comer tranquilo, despéjate, y pásate por aquí a las 16”.
Yo me puse a pensar que sería lo que me iba a ofrecer, estaba confuso. El tercer mecánico, el de prácticas, me invito a comer a su casa. Lo que me confundió aún más, no comprendía mucho lo que pasaba, ¿a donde había llegado?

Dan las 16 y me encuentro en la puerta del taller, llega el jefe y me dice: “venga, quítate esa camisa que te vas a ensuciar, vas a arreglar tú tu coche. Yo te voy a indicar como”. Yo me sorprendía cada vez más, no me creía lo que estaba pasando.
Y así como empezó todo. Por fin llegados a este punto ya empiezan las fotos. Me puse a desarmar el coche con el mecánico de prácticas. A ambos nos vino bien, claramente, a mi mejor.

Quitamos la tapa del bloque y nos encontramos con esto!
Todo inundado, hecho una mierda. Continuamos desmontando, aquí en estas fotos se ve el estado exterior y un poco del interior del coche. Como veis venia con unas mantas “preciosas” y por fuera estaba mejor aún jajajaja. Yo como os decía, la verdad, no lo veía tan mal a pesar de estar horrible.
Quitamos el bloque y nos encontramos con esto.
Como veis la junta en magnifico estado, esto explicaba perfectamente el agua por todo el bloque. Lijamos hasta eliminar las imperfecciones del bloque.
Hicimos un apaño a la culata, cambiamos algunas piezas que estaban hasta arriba de óxido, distribución, aceite y filtro. Lo más económico posible y con esperanzas de que llegara a Galicia.
Después de 10 días en el taller acabamos. Y yo que iba con la idea de solo quedarme uno….
Por suerte un amigo de Madrid me acogió en su piso. La verdad, parecía todo de película, difícil de creer, tanto así que ni yo mismo acababa de creérmelo.
Recuerdo que acabamos un jueves a la noche. Por lo que me iba a casa de mi amigo al dia siguiente, es decir, el viernes a la mañana partía hacia Santiago.
De camino al piso de mi colega por el periférico recuerdo ir con una sonrisa y con un alivio encima pensando por fin me voy… hasta que el coche empieza a tirones y a bajar de velocidad… 80, 70, 60, 50, 40… mi sonrisa se borró en un instante, me puse a buscar una salida rápido, hasta que encuentro una, me detengo como puedo y llamo al mecánico preocupado nuevamente. Me dice que no me preocupe y que intente llegar a casa de mi colega como pueda y con calma, que me pase temprano por el taller y a ver si lo podíamos arreglar para que marchara.
Así al día siguiente, después de haber dormido unas 5 horas y malamente por el estrés, me dirijo al taller por dentro de la ciudad y llego sin problemas. Lo primero que miramos fue el filtro de aire… y nos encontramos con que no estaba sucio, sino, lo siguiente.
Lo limpiamos y lo parapetamos. Se lo ponemos y salimos a probar el coche, iba “bien”, otra vez…
Echaba mucho humo pero funcionaba. Por lo que me despido y agradezco un montón su ayuda, quito esas horribles mantas (como se ve en las fotos, los asientos delanteros no son los originales) y a eso de las 12 comienzo mi viaje hacia Santiago.
Iba muerto de sueño y no me fiaba mucho del coche, por lo que intentaba parar cada 100-150km a hacer un descanso, tanto yo como el coche.
Y así poco a poco me fui tomando cafés durante el camino. Y dejando reposar el coche sobre media hora haciéndole controles en el nivel de aceite y refrigerante, así como viendo que estuviese limpio.
Después de muchas horas y muchos cafés llegue a Santiago. No os podéis imaginar el alivio que supuso ver la ciudad. Quería cambiar el motor, ya que no iba bien, echaba mucho humo, y en Santiago volvió a ir a saltos, le puse un filtro nuevo, pero no era eso, parecía que se ahogaba. Aquí me di cuenta de la suerte que tuve de justo haber llegado a Santiago sin ningún problema. (No tengo foto de la llegada lamentablemente, se borro junto a muchas otras fotos

Y hasta aquí por hoy!! mañana subo mas de esta historia que incluye mas fotos y menos texto como comentaba!